Hermanas fallecidas

Mary Christopher Sweeney - Fiyi
17/12/1921 - 10/05/2018

Celebrando la vida de una Misionera Marista

El nombre de pila de la Hermana Mary Christopher era Nora Christina Sweeney. Era la doceava hija de Kate y Tom Sweeney y había nacido el 17 de diciembre de 1921 en County Sligo, Irlanda.

Nora Sweeney creció en County Sligo, el lugar que el poeta W.B. Yeats describe como la Tierradel deseo del corazón. Nora disfrutaba de la vida hasta el fondo, y atravesaba valles y subía colinas hacienda resonar sus cantos por donde pasaba, tanto que las gentes de las aldeas de los alrededores decían: “ya está aquí la hija de Tom Sweeney”. Llegó un día en que Nora Christina oyó un llamado particular – Dios la estaba llamando. Siguió el llamado con enorme generosidad– se sentía llamada por una elección gratuita a la familia de la Beata Virgen. Y así Nora entró en el Noviciado Marista en Carrick-on-Shannon y allí se quedó de 1944 a 1946.

El 26 de agosto de 1946, Nora hizo los primeros votos en la Congregación de las Hermanas Maristas, y recibió el nombre de Mary Christopher. Fue una de las pocas hermanas que conservó su nombre de religiosa. En efecto, durante el Vaticano II, la mayoría de las hermanas tomó la opción de volver al nombre de pila.

Después de su primera profesión, la Hermana Mary Christopher empezó su camino que la llevó a Inglaterra, Francia y, luego, a Fiji. Su profunda fe y su generosidad al servicio de Dios se unían a un fuerte sentido de humor, al celo misionero, al amor por el trabajo y a la constante toma de conciencia de la necesidad de bienestar físico y ejercicio. Estas cualidades le dieron la posibilidad de aprender el idioma de las islas Fiji, de conocer a las familias allí donde se encontraba y, gracias a su memoria fotográfica, era capaz de volver a contar las historias de las personas con quienes se ponía en contacto. Este don particular, el saber contar historias, no la dejó nunca y le encantaba oír noticias de todos y era capaz de contar sus propias historias con gran interés y entusiasmo. Era una ávida lectora del periódico Fiji Times cuyas noticias la ponían en contacto con lo que ocurría en Fiji.

Mary Chris tenía su propio móvil, que la conectaba con su familia en el extranjero. Al ser la pequeña de una gran familia, la Hermana recordaba todas las anécdotas de la vida en casa y quería profundamente a todos sus parientes.  Sus sobrinos y sobrinas, y sus sobrinas nietas fueron varias veces a Fiji con ocasión de sus aniversarios y jubileos.

La primera misión de Mary Chris en Fijo fue en Namosi, en el año 1955. Allí iba a caballo a visitar a las familias y los niños se quedaban atónitos ante el color de su clara piel. Pasó allí un año y luego la enviaron a   Solevu, Levuka, Yasawa, Sídney, Lautoka, Cawaci, Nadi, Wairiki, Lami. Volvió a Nadi en 2011, y fue muy querida por las Hermanas y los feligreses. Mary Christopher no fue solo capaz de aguantar avatares y penas con paciencia, sino que además fue una verdadera presencia marista en comunidad. Fue fuente de inspiración y oración para todos aquellos que fueron a visitarla en búsqueda de sus consejos y oraciones. Mary Chris siguió amando la vida hasta el fin, y gozaba siempre cuando comentábamos noticias de nuestras familias.

Después de unas pocas semanas durante las cuales guardó cama, la Hermana Mary Christopher falleció en paz la mañana del jueves de la Ascensión, a las 7.45am, después de haber recibido la Santa Comunión y la unción de los enfermos, de las manos del Padre Lasaqa.

Mary Chris, tú dejaste un gran vacío en nuestros corazones. Te echamos en falta, pero creemos que estás en paz en un lugar especial que por ti tenía preparado nuestro Padre Celestial.

Hna. Rosemary Simon sm

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